C’era una volta…..

Un sueño, repetido en la misma sucesión durante dos noches, ha generado el deseo de escribir este libro. Autobiográfico, con algunos rastros del mundo onírico, que afecta cada momento de la narración: el recuerdo y la sublimación del recuerdo mismo hacen que la imaginación se parezca cuanto màs a la realidad. El simbolismo y el alternarse de las situaciones repiten constantemente emociones y sentimientos, puntos fijos de la narración. ¿Es real la realidad o es tan solo un recuerdo muy real? El libro no se encarga de solucionar este asunto, pero hay un empuje emocional que sigue haciendo que el recuerdo sea lo bueno y lo positivo de la existencia permitiendo observar la realidad, en cuanto continua búsqueda del amor y de la felicidad del hombre y de la naturaleza. El mensaje representa el punto de vista personal del autor de promocionar a si mismo y a los hombres la existencia de un equilibrio positivo entre la mente el cuerpo, el humano y el divino, a través la aplicación del amor.