Un sueño, repetido en la misma sucesión durante dos noches, ha generado el deseo de escribir este libro. Autobiográfico, con algunos rastros del mundo onírico, que afecta cada momento de la narración: el recuerdo y la sublimación del recuerdo mismo hacen que la imaginación se parezca cuanto màs a la realidad. El simbolismo y el alternarse de las situaciones repiten constantemente emociones y sentimientos, puntos fijos de la narración. ¿Es real la realidad o es tan solo un recuerdo muy real? El libro no se encarga de solucionar este asunto, pero hay un empuje emocional que sigue haciendo que el recuerdo sea lo bueno y lo positivo de la existencia permitiendo observar la realidad, en cuanto continua búsqueda del amor y de la felicidad del hombre y de la naturaleza. El mensaje representa el punto de vista personal del autor de promocionar a si mismo y a los hombres la existencia de un equilibrio positivo entre la mente el cuerpo, el humano y el divino, a través la aplicación del amor.